Fortalece el sistema inmunológico:

Al besar, intercambiamos una gran cantidad de bacterias y, aunque pueda parecer desagradable, esto puede ayudar a fortalecer nuestro sistema inmunológico y aumentar nuestra resistencia a enfermedades.

Alivia el estrés:

Los besos liberan endorfinas, hormonas que nos hacen sentir bien y reducen los niveles de estrés. Además, el acto de besarse es una forma de relajación y conexión con nuestra pareja, lo que nos ayuda a sentirnos más tranquilos y seguros.

Mejora la circulación:

Al besar, aumenta el flujo sanguíneo en nuestro cuerpo, lo que puede ayudar a reducir la presión arterial y mejorar la circulación en general.

Quema calorías:

Aunque no lo creas, besar puede ser un ejercicio físico muy efectivo. Se estima que un beso apasionado puede quemar hasta 6 calorías por minuto.

Fortalece la relación:

El acto de besarse es una forma importante de intimidad y conexión emocional. Los besos pueden fortalecer los lazos entre una pareja y mejorar la calidad de su relación.

Mejora la autoestima:

Besar puede ser una forma de sentirnos deseados y amados, lo que puede ayudarnos a mejorar nuestra autoestima y confianza en nosotros mismos.

Alivia el dolor:

Los besos pueden ayudar a aliviar el dolor de cabeza y menstrual, gracias a la liberación de endorfinas que tienen un efecto analgésico.